Pobre derbi con victoria rossonera.
lunes, 5 de mayo de 2014
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A las 20.45 comenzaba a rodar el esférico en el Giuseppe Meazza, ambos equipos llegaban peleando unicamente por Europa League, y, en caso de Milan, necesitará mucha suerte para lograr clasificarse a esta.
Los primeros minutos el balón no tuvo un dueño claro, pero poco a poco y con Adel Taarabt como figura principal, el cuadro dirigido por Clarence Seedorf se fue haciendo dueño de la pelota y de las ocasiones.
El marroquí venía a recibir al medio, ayudaba defensivamente y presionaba intentamente en todas las partes del terreno de juego, pero no, Taarabt no iba a ser el hombre del partido, ni Balotelli, e incluso tampoco Kakà. El hombre del partido iba a ser el holandés Nigel De Jong, el fútbol quiso rendirle homenaje a uno de eses jugadores que trabaja mucho, que presiona, que libera a sus compañeros, pero siempre en un segundo plano.
Y es que De Jong venía de pasar una semana de vacaciones en su querida Amsterdam, y eso se le notó. Fresco, apoyando en la salida del balón, pases largos perfectos...y si, así llegó la primera oportunidad clara del encuentro, pase largo del holandés hacía Kakà, el brasileño controla y a bote pronto engancha una excelente volea que se estrella en el larguero del arco defendido por Handanovic
A partir de esa ocasión vimos a un Milan más atrevido, más llegador y, por supuesto, más merecedor de llevarse los tres puntos.
En el segundo tiempo más y mejor, el equipo rossonero se fue a por Inter, y se lo llevó.
En el minuto 63, Mario Balotelli puso una falta lateral al segundo palo donde apareció De Jongque, con un potente remate de cabeza, hizo el primero y único tanto del derby.
La entrada de Ricky Álvarez en los últimos minutos hizo que Inter encerrase al AC Milan en su área, pero esto no fue suficiente ni para que los interinos consiguieran disparar a la portería defendida por Abbiati.
Jorge Guitián
@Jorge2rua / @ACMilanGoleador
Los primeros minutos el balón no tuvo un dueño claro, pero poco a poco y con Adel Taarabt como figura principal, el cuadro dirigido por Clarence Seedorf se fue haciendo dueño de la pelota y de las ocasiones.
El marroquí venía a recibir al medio, ayudaba defensivamente y presionaba intentamente en todas las partes del terreno de juego, pero no, Taarabt no iba a ser el hombre del partido, ni Balotelli, e incluso tampoco Kakà. El hombre del partido iba a ser el holandés Nigel De Jong, el fútbol quiso rendirle homenaje a uno de eses jugadores que trabaja mucho, que presiona, que libera a sus compañeros, pero siempre en un segundo plano.
Y es que De Jong venía de pasar una semana de vacaciones en su querida Amsterdam, y eso se le notó. Fresco, apoyando en la salida del balón, pases largos perfectos...y si, así llegó la primera oportunidad clara del encuentro, pase largo del holandés hacía Kakà, el brasileño controla y a bote pronto engancha una excelente volea que se estrella en el larguero del arco defendido por Handanovic
A partir de esa ocasión vimos a un Milan más atrevido, más llegador y, por supuesto, más merecedor de llevarse los tres puntos.
En el segundo tiempo más y mejor, el equipo rossonero se fue a por Inter, y se lo llevó.
En el minuto 63, Mario Balotelli puso una falta lateral al segundo palo donde apareció De Jongque, con un potente remate de cabeza, hizo el primero y único tanto del derby.
La entrada de Ricky Álvarez en los últimos minutos hizo que Inter encerrase al AC Milan en su área, pero esto no fue suficiente ni para que los interinos consiguieran disparar a la portería defendida por Abbiati.
Jorge Guitián
@Jorge2rua / @ACMilanGoleador
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