Racing 1-0 Puebla: El botín de oro y otro sueño Libertador

Con una gran actuación colectiva, planteo acertado y buen fútbol, los de Sava lograron el primer gran objetivo del año. De la mano de un espléndido Gustavo Bou, el equipo ganó, superó la fase previa y dejó a su gente más que feliz de cara a un año con muchas expectativas.

Después del 2-2 en el encuentro de ida, toda la presión estaba sobre la espalda de los mexicanos, que tenían que marcar por lo menos un gol para seguir en carrera. Aún así, la academia era local, el Cilindro estaba repleto y Sava lo tenía claro; no sólo quería clasificar, quería dejarle a su gente una buena imagen del equipo.

Arrancó el partido y se vio claramente el planteo. Pasados los 5', Racing tomó el control con una presión alta sobre los defensores del Puebla, que fieles al estilo de juego de su liga, siempre trataban de salir tocando corto y al pie. Esto le facilitó las cosas al local, que robó una gran cantidad de pelotas en situación ofensiva.

Después de manejar bien el balón por todo el ancho del campo, a los 15' llegó la primer ocasión manifiesta de gol y con ella la polémica. Tras un córner para el equipo académico, la pelota quedó boyando en la boca del área, cuando Aued la conectó con su zurda y después de una especie de carambola, Camacho se vio solo para habilitar a Lollo y que éste la empuje a la red. El árbitro pitó señalando la mitad de cancha y todo era festejo y algarabía en el estadio. Sin embargo, sucedió algo pocas veces visto en el fútbol. El árbitro, luego de sancionar el gol, se fue a hablar con el línea (quien no había levantado la bandera) y después de casi 5 minutos de discusión, el gol fue anulado y se sancionó fuera de juego de Camacho.

El equipo albiceleste siguió manejando el partido y tratando de abrir el marcador. Con buen juego, pero sin mucho éxito en sus llegadas, se fue acercando cada vez más. Primero con una pared dentro del área de Milito y Bou, después con algunos centros desde la derecha y con arremetidas de Acuña por izquierda también.

Al final de la primera parte, al Puebla se lo vio tranquilo y logró salir un poco del fondo, pero nunca tocando el área rival. Así también arrancó la segunda parte. La cancha seguía claramente inclinada a favor de la Academia, aunque los de la franja salían jugando y demostrando su buen pie, pero de manera cada vez más arriesgada.

La primera del complemento iba a llegar después de una arremetida de Acuña por izquierda, que habilitó a Milito y el príncipe definió por encima de Campestrini, pero el remate se fue ancho. Luego de eso,  ingresó el paraguayo Óscar Romero, que como siempre sirvió de revulsivo para el equipo del Colorado.

Fue a los 29' que el riesgo que tomaban los defensores visitantes les iba a pasar factura. Luego de un pelotazo buscando a Bou y un rechazo de cabeza, la pelota le quedó al jugador Acosta, quien al querer salir jugando se metió en un aprieto con Milito adelante y Acuña atrás y entregó la pelota a la medialuna, donde se encontraba el héroe, goleador y figura de este Racing Club, que no perdonó a Campestrini y se la mandó a guardar con un remate cruzado.

Los locales siguieron manejando el juego y Puebla se salió de su buen juego con el afán de buscarlo como sea, pero nunca terminó en nada. Ingresó también el 'Licha' López, que le dio aire a la delantera académica, pero todo se mantuvo tranquilo hasta que el brasileño Ricardo Marques pitó el final del encuentro.

Ahora Racing se encuentra en el grupo 3, junto con Boca Jrs. (Argentina), Deportivo Cali (Colombia) y Bolívar (Bolivia). El debut será el 24 de febrero, en condición de local, contra el equipo boliviano.


El jugador del partido:

Todos los aplausos de la noche se los llevó Gustavo Bou. El delantero de 25 años demostró que no fue sólo una buena temporada la anterior y ya lleva tres goles en los primeros tres encuentros oficiales del 2016, dos por Libertadores y uno en el Torneo de Transicion. Tiene bien ganado el apodo 'Pantera'.