Ápices de campeón

La Boca sacaba su a relucir su mejor vestido y todos sus accesorios para recibir a los jugadores propios y a los ajenos. La gente estaba ilusionada, sabía que si Boca ganaba podía despegarse de su molesto escolta y conseguir oxígeno.

Mueve Banfield y, señores, todos a sus asientos.

La banda derecha de Banfield no tiene custodia y Boca aprovecha eso en la madrugada del partido. Rodrigo Bentancur aprovecha la situación y se posiciona para centrar. El balón bombeado es recibido, torpemente, por Jonathan Calleri, que medio patea y medio pasa el balón a Gino Peruzzi. El lateral entró como una tromba al área y definió ante Alberto Bologna. 45.000 almas gritaba “Goool”.

                                          foto: TyC

El taladro no se desmoralizó ante el gol e inmediatamente desplegó su mejor arma: la velocidad de Mauricio Cuero. El delantero colombiano parecía tener un pulmón más y hacía sucumbir a los defensores xeneizes con cada arranque. Sin embargo, no llegaba inquietar a Agustín Orión.

El xeneize quería aumentar la diferencia y todos sus ataques eran dibujados por su estrella, Carlos Tevez. El apache logró construir una gran asociación con Nicolás Lodeiro. Ambos convirtieron en figura al arquero visitante.

                                      foto: La Nacion
                                
A los 20 minutos el partido decae. Boca se mueve al ritmo de un río con poco caudal y Banfield sólo consigue acercarse por medio de centros sin destino.

Tevez agiganta su figura y baila sobre la pelota para esquivar las patadas que le arroja la gente del taladro. El apache es el dueño del ataque, todas las pelotas deben pasar sus botines. Con tiros, con pases y con gambetas se gana los aplausos. Toca, pasa y si es necesario aguanta ante jugadores que le llevan 20 centímetros.

El taladro sigue ganando por los costados pero no puede verticalizar. Apenas un tiro de Nahuel Yeri, sobre el final del partido, logra despertar a Orion.

En la segunda mitad, Banfield intentó ser el dueño de la pelota o por lo menos intentó compartirla. Boca la corría y la recupera, Banfield seguía la misma secuencia y el partido aburría. Ambos bandos se mostraron muy imprecisos en el comienzo del complemento.

Boca empezaría a desequilibrar. En un ataque, Monzón avanzó sin mucha elegancia y cuidó la pelota a lo guapo, se la dio a Tevez que de alguna manera le generó el espacio a Lodeiro. El uruguayo apunta y…demuestra que está enemistado con el arco.

A Banfield le costaba hasta jugar de contra. No tenía la pelota y, además, a los 10 minutos se quedaría con diez jugadores, luego de que Silvio Trucco pintara de rojo a Yeri.

El calvario seguiría para el equipo del sur, en menos de un minuto pasaría a jugar con diez jugadores y a perder por dos goles. Jonathan Calleri, empujaría la pelota a la red tras un córner que nadie pudo despejar.

                                          Foto: @la12tuittera

                                          

El taladro se olvida del empate y de jugar.

Daba lo mismo si el partido terminaba a los 30 o a los 45. Esos 15 minutos sólo sirvieron para que Carlos Tevez corone una gran actuación con un gol. El apache únicamente tuvo que soplarla luego de que Calleri lo habilitara frente al arco.

                                 foto: TodoDeportes

Boca sentenciaba el encuentro con autoridad y era el ganador indiscutido. La gente se rompía las manos, saltaba y festejaba. Los xeneizes saben que están cada vez más cerca de gritar “Dale campeón”.

Goles:

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