Glushakov prolonga ´in extremis´ el gafe inglés en un vibrante partido

Se podría decir que el combate del día de hoy entre británicos y eslavos ha resultado ´nulo´ ya que  el empate acontecido los deja igualados en segundo puesto, por detrás de la victoriosa Gales y superando a Eslovaquia en esta primera jornada. Inglaterra, país al que se considera inventor del deporte rey, ostentaba hasta el día de hoy un récord un tanto deshonroso: no había ganado NUNCA el primer partido de una Eurocopa en las 8 ediciones que había disputado. El combinado ruso, pese a su experiencia y garra, parecía un rival propicio para romper el maleficio. De hecho, estuvo a punto de suceder, pero en el balompié hasta el último segundo cuenta.

El primer tiempo fue de claro dominio inglés, pero sin llegar a materializar en ninguna ocasión; ni Sterling ni Alli ni Lallana fueron capaces de hacer efectivo el claro dominio de la pérfida albión. Por otra parte, Slutski y sus pupilos aguantaban como podían y trataban de crear peligro a balón parado, su punto fuerte. El carril derecho, formado por el dúo del Tottenham Walker-Alli, fue un quebradero de cabeza para Schinnikov, que se vio desbordado en todo momento por la versátil dupla. Sin embargo, los disparos fallidos de Kane, Lallana y Rooney, colocado sorprendentemente en el doble pivote junto a Dier, impidieron a los suyos cobrar ventaja antes del descanso.

Tras el paso por los vestuarios, la actitud de Rusia sufrió un cambio radical, hombres como Shatov o Kokovin comenzaron a inquietar a Hart, e incluso gozaron de un par de oportunidades realmente magníficas; Dier cabeceó hacia su meta a la salida de un córner y casi se marcó en propia y Smolov disparó con rosca y el balón salió pegado al palo. En torno al minuto 60 reaccionaron los pross que, llevados en volandas por una afición que era consciente de la importancia de comenzar con buen pie en el torneo.

Diez minutos después, el capitán Wayne Rooney realizó un gran disparo desde la frontal del área al que respondió Akinfeyev con una tremenda parada de esas que dan puntos, el balón rebotó en la madera y Lallana la envió de nuevo al poste, aunque se indicó fuera de juego. Hodson y sus ayudantes comenzaban a perder la paciencia.

Justo cuando mejor jugaba Rusia y más sometida se sentía Inglaterra tuvo lugar algo que es muy habitual en el balompié. Una polémica falta en el borde del área rusa cometida sobre Delle Alli acabó en las mallas adversarias gracias a un gran disparo de Dier, el público inglés rugía creyendo que ya habían logrado su primera victoria. El técnico ruso decidió introducir a Shirokov y, poco después, a Glushakov, experimentado capitán soviético que fue, a la postre, el héroe de los suyos. Hodson dio entrada a Wilshere y Milner para controlar el esférico y dejar que el tiempo pasase.

Cuando mayor parte de la grada del Velodrome ya celebrara la victoria, un impecable cabezazo de Glushakov ante el que nada pudo hacer Hart colocaba las tablas en el electrónico. Con ellas también se establecía una gran igualdad en el grupo, en que aun puede pasar de todo y hasta 3 naciones podrían lograr avanzar a los octavos.

Alineaciones:
Inglaterra (4-2-3-1): Hart; Walker, Cahill, Smalling, Rose; Dier, Alli, Rooney (Wilshere 78’), Sterling (Milner 87’), Lallana, Kane

Rusia (4-4-2): Akinfeev; Smolnikov, Ignashevich, Berezutski, Schennikov; Neustadter (Glushakov 80’), Golovin (Shirokov 77’), Smolov, Shatov; Kokorin, Dzyuba

Redactado por Manrique Barbero, @manriquezurdito en Twitter