Dios odia al fútbol
domingo, 24 de abril de 2016
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No se explica cómo un campeonato plagado de goles tuvo una fecha tan nefasta como la doce. Con la escacez de goles contribuyeron decanos y piratas. Sólo el odio de Dios a los hinchas explicaría esta sequía de goles en el domingo.
Más de un hincha cambiaría esta fecha por las siete plagas que azotaron Egipto en la época de Moises. El partido en Córdoba aburrió. Fue una síntesis de tiros libres a la barrera, de disparos a las tribunas, de tiros de esquina a la cabeza de los defensores, de fricción en la mitad de la cancha, de pases errados, de defensores sin trabajo y de arqueros vagos.
Ni los errores de Cristian Luchetti y la defensa decana pudieron ser capitalizados. No queda otra, Dios odia al fútbol.
El pitido final del árbitro fue lo más esperado.
Atlético Tucumán continúa sin poder ganarle y anotarle goles a los cordobeses en Primera División. Los cordobeses siguen con un campeonato mediocre y llegan a 12 puntos en el torneo local.
Autor: Luis Gabriel Cazzullo
Twitter: @luiscazzullo
Más de un hincha cambiaría esta fecha por las siete plagas que azotaron Egipto en la época de Moises. El partido en Córdoba aburrió. Fue una síntesis de tiros libres a la barrera, de disparos a las tribunas, de tiros de esquina a la cabeza de los defensores, de fricción en la mitad de la cancha, de pases errados, de defensores sin trabajo y de arqueros vagos.
Ni los errores de Cristian Luchetti y la defensa decana pudieron ser capitalizados. No queda otra, Dios odia al fútbol.
El pitido final del árbitro fue lo más esperado.
Atlético Tucumán continúa sin poder ganarle y anotarle goles a los cordobeses en Primera División. Los cordobeses siguen con un campeonato mediocre y llegan a 12 puntos en el torneo local.
Autor: Luis Gabriel Cazzullo
Twitter: @luiscazzullo
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