El derbi vasco no ha podido tener más emoción. Real sociedad y Athletic Bilbao se enfrentaban en esta Jornada 6 de la Liga BBVA en el que estaba llamado a ser el partidazo del fin de semana, y ha cumplido las expectativas. Mucha intensidad por parte de ambos equipos, y demasiadas imprecisiones también, aunque ninguno de los dos conjuntos ha logrado decantar la balanza.

La primera parte comenzó con el Athletic volcado sobre la portería de Gerónimo Rulli. Aritz Aduriz pronto enfiló hacia la meta de los 'txuri-urdin' pero se topó con el arquero rival y el colegiado. Los 'leones' reclamaron un penalti claro de Asier Illarramendi por mano en el área que el árbitro no señaló. Esto terminó por encender a los de Ernesto Valverde, que tuvieron que conformarse con el 0-0 al descanso.

En la segunda mitad, el guion no cambió en exceso. Rulli continuó aguando la fiesta a los atacanes del Athletic con varias intervenciones y, de hecho, los de Bilbao reclamaron otra pena máxima. La tensión se mascó en el ambiente hasta los instantes finales de un partido que, en realidad, no fue nada vistoso para el aficionado pero sí entretenido dada la historia que trae detrás. 

Este empate deja insatisfechos a ambos equipos aunque puede que el Athletic haya merecido algo más la victoria. Sea como fuere, los de David Moyes se quedan con un punto que les mantiene en la zona cómoda de la clasificación mientras que los de Valverde tendrán que regresar pronto a la senda de la victoria. Rozan ya los puestos de descenso con tan solo cuatro puntos con lo que la necesidad de sumar se hace imperiosa para este equipo, que a principios de temporada aspiraba incluso a batir lo logrado la pasada temporada.